Mezcla 2 cucharaditas (4g) de NESCAFÉ® Gold con dos cucharadas (30ml) de agua caliente (unos 80º, cuando empiecen a salir burbujitas. No hace falta que hierva, así ahorrarás electricidad).
Calienta una almendras cortadas en rodajas en una cacerola a fuego medio durante unos 40 segundos para tostar las almendras y crear el aroma. No dejes que se quemen.
Calienta 170ml de leche de almendras a fuego lento hasta que esté caliente, a unos 65-75 ºC . Vierte la leche caliente en una jarra y agrega medio cucharadita de extracto de almendra (o vainilla). Endúlzalo al gusto.
Bate durante un minuto hasta conseguir una textura espumosa. Usa una batidora eléctrica, preferiblemente.
Vierte la leche con la textura espumosa en una taza dejando la espuma en la parte superior. Cúbrelo con las almendras tostadas y sirve.