Licúa el hielo y el NESCAFÉ® Café con Leche hasta lograr una textura cremosa y sin hielos grandes.
Añade la leche condensada y vuelve a licuar por 10 segundos.
Sirve y decora con más leche condensada.
Disfruta el lado más dulce y cremoso de NESCAFÉ® con este delicioso frapuccino, perfecto para el postre del fin de semana.