El National Institutes of Health (NIH) lo define como tener energía y vigor para realizar diversas actividades, además de la capacidad para crecer, vivir y desarrollarse. La vitalidad es uno de los pilares del bienestar psicológico, según la investigación On energy, personality and health: subjective vitality as a dynamic reflection of well-being.
Este estudio señala que las personas experimentan niveles altos de energía cuando consideran que tienen mayor autonomía, iniciativa y espontaneidad. En ese sentido, algunos de los aspectos esenciales para aumentar la vitalidad son:
Alimentación balanceada: consumir alimentos frescos, variados y completos que aporten los nutrientes necesarios y cumplir con los cinco tiempos de comidas.
Mantenerse hidratado: beber suficientes líquidos durante el día (entre dos y tres litros), que incluyen agua, infusiones, caldos y café.
Realizar actividad física: 150 a 300 minutos de ejercicio semanal para mantenerte activo y saludable, como recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Descansar adecuadamente: la Academia Americana de Medicina del Sueño (AASM, por sus siglas en inglés) indica que un adulto debe dormir 7 horas o más.
Fortalecer la salud mental: prácticas como respiraciones, yoga, pausas activas, etc. ayudan a regular las emociones, mantener la tranquilidad y alejar el estrés.
Durante el día es importante tomar descansos de, al menos, cinco minutos para recargar energía. Esto, sumado a los hábitos anteriormente mencionados, permiten que el cerebro se oxigene. Las pausas activas no son la única opción, por eso te contamos otras cinco cosas que puedes hacer en esos momentos:
Si a una lista interminable de pendientes que te abruma se suma el agotamiento y la somnolencia, una caminata corta en espacios exteriores es una excelente opción para estas ocasiones. Además, contribuye a la salud física.
De acuerdo con Michael Mosley, presentador del podcast de la BBC Just One Thing, caminar al aire libre te expone a luz del día, que alerta al cuerpo y reduce la producción de melatonina. Esta es la denominada hormona del sueño, que genera sensación de fatiga y aumenta cuando hay poca luz.
Levántate de tu asiento y prepara una taza de café. Es una buena forma de tomar un respiro, compartir este espacio y bebida con tu familia, amigos o compañeros de trabajo y recargar tu energía.
Si tienes a la mano NESCAFÉ® Dolca®, disfrutarás de esta bebida deliciosa en segundos con solo agregar agua caliente, pues se disuelve fácilmente. Tiene un sabor suave e inigualable, que lo hace perfecto para preparar el tinto que tanto les gusta a los colombianos.
Al ser un producto práctico y rendidor, podrás disfrutarlo cuantas veces desees y a un precio insuperable. Agrega azúcar o panela para endulzar esos momentos que eliges para mantener y fortalecer tu vitalidad.
La organización te permite reenfocar tus esfuerzos y aprovechar mejor tu tiempo cuando tienes muchas tareas. Por un lado, mantener un lugar cuidado significa tranquilidad y mejores condiciones para desarrollar tus labores.
Por el otro, con las tareas pendientes lo que queda es hacer una lista, poniendo las urgentes al inicio. Luego, da prioridad a las sencillas para finalizar con las complejas. Si empiezas con pequeños logros estarás más motivado para continuar.
La puedes practicar en cualquier momento y en el lugar en que te sientas a gusto, dedicando unos cuantos minutos. Si es difícil concentrarte al principio, prueba una meditación guiada usando aplicaciones móviles o videos cortos.
Ayuda a reducir el estrés, la tensión y calmar la mente durante una jornada ajetreada. Podrás reorganizar tus pensamientos y adquirir una perspectiva nueva de situaciones que te pueden causar intranquilidad.
La creencia de que realizar actividades continuas y sin descanso genera más productividad no es realmente acertada. Si esta dinámica se mantiene por largos periodos de tiempo, inevitablemente habrá bajones de energía.
En ese caso la mente y el cuerpo necesitan descansar y una especie de reinicio. Para BBC Mundo, Guy Meadows, especialista en fisiología del sueño y cofundador de The Sleep School, señaló que 10, 20 o hasta 90 minutos de siesta contribuyen a recuperar la energía, el estado de alerta y mejorar el ánimo.
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Fuentes: